La mejor inspiración: emprendimientos que surgieron con la maternidad

Autora: Alapa
Fuente: Alapa.cl

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Cuando se es mamá, a muchas nos surge el impulso por re ordenar el mundo propio y externo, como tratando de adecuarlo a una nueva horma. A un molde de nosotras mismas que en el camino debemos acomodar, conocer y amar. Así, es como la maternidad se sitúa como una experiencia transformadora. Aquí relatos de poderosas mujeres que inspiradas en su maternidad crearon proyectos propios.

Es un tema bullante, la maternidad parece haberse desnaturalizado. Leslie Power, conocida psicóloga clínica, lo transformó en una bandera de lucha en Chile, como tantas otras mujeres alrededor del Globo. Hoy, muchas futuras madres y mamás están en la búsqueda de conectarse con la maternidad desde otra orilla. De adueñarse de ella, de apropiarse del ser madres disfrutando del proceso, a todas las anchas del instinto, amor y  garra que eso significa. De tener el tiempo y espacio para criar como corresponde el propio deseo de hacerlo.

En Alapa estamos muy orgullosos de decir que somos el vivo ejemplo de esta nueva apropiación de la maternidad, siendo la vitrina de todo el esfuerzo, creatividad y trabajo de muchas mujeres que luego de crear vida, dieron a luz bellos emprendimientos.

Por todo lo antes dicho y mucho, muchísimo más, compartimos contigo el testimonio de algunas de nuestras brillantes emprendedoras. 

No podíamos dejar de partir, por el testimonio de Rocío Blaitt, fundadora de Alapa. Aquí su historia.

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Rocío Blaitt,  Alapa.cl

Alapa surgió desde la experiencia de una maternidad en donde uno va sintiendo esta necesidad de salir con tu hijo, de vivir la ciudad con tu hijo. Teniendo la motivación de tener una maternidad cercana consciente y sana. La maternidad influyó directamente,  buscado un trabajo que me permita tener flexibilidad de horario y poder pasar el mayor tiempo posible con mis hijos.

La búsqueda

Así, después de ser mamá, comencé a buscar un trabajo  que cumpliera con esas condiciones, y sin encontrarlo, dejé de buscar un empleo,  eso significó autogestionarme y emprender de manera independiente.

Ser mamá te hace mirarte a tí misma, todo el tiempo cuestionarte las cosas, cambian las prioridades. Yo creo que al ser mamá una empieza a conocerse profundamente así misma. En relación a los costos obviamente uno se pospone como profesional, y los proyectos personales quedan en segundo plano. Hay un cansancio natural por esas noches interrumpidas, que a veces la máxima aspiración que uno tiene es nada más que dormir de corrido. Obviamente uno se replantea y creo que es una oportunidad para mirar la vida desde la perspectiva del alma más que desde el ego.

El proyecto

Así surgió Alapa, por el interés de buscar datos interesantes de productos que no se vendían en el mercado masivo para para mi hija Ema. Datos que a veces son difíciles de encontrar y que van de boca en boca.

Lo primero que busqué fueron pañales de tela, que hace un tiempo era muy escaso en Chile. Para meterme a investigar en internet requerí de bastante tiempo y como las madres tenemos poco tiempo, dan ganas de encontrar todos tus datos en un sólo lugar. Así, en la búsqueda de datos interesantes empezaron a surgir muchos emprendimientos que producían cosas para niños, fue una sorpresa encontrar tantas pymes chilenas que ofrecían cosas interesantes… que daban ganas naturales de reunirlas para que estuvieran todas juntas, para así facilitar la búsqueda para las madres.

Además de los productos,  estaba la oferta de panoramas y servicios para niños que también buscarlos en Internet requería un tiempo, sobre todo el tema los panoramas… Sorprendía la cantidad de oferta, de la que muchas veces uno no se enteraba,  también daban ganas de reunirlos todos en un sólo lugar y poder planificar la salida de los fines de semana. Ya que yo y mi socia, ese momento veníamos llegando de vivir en provincia varios años… volvimos a Santiago con hijos pequeños entonces la ciudad aparecía con otras necesidades desde nuestro nuevo rol de madres.

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Francisca Ferrer, Rukayen

Rukayen nace en la búsqueda de espacios de juego para llevar a mi hijo, donde tanto él como yo estuviéramos cómodos, disfrutando de un momentos juntos.  De no ser por la maternidad Rukayen quizás no existiría. El ser mamá me inspiró a investigar, buscar las mejores opciones y crear el espacio más adecuado para nuestros niños.

Prioridad

La maternidad para mi es lo más importante, he sido afortunada de haber creado un proyecto que me permite ser mamá y emprendedora a la vez. Mi mejor cliente es mi hijo.

Dar lo mejor

Si me preguntas lo bueno de ser mamá, Todo!!! descubrir lo que es el amor incondicional. Para mi no tiene costos, solo retribuciones, considerando que la vida tiene sus días grises y soleados. Tuve a mi hijo en una edad donde he podido disfrutarlo y además es mi gran inspiración.

Como experiencia transformadora, cada mujer lo vive diferente, en mi caso siempre supe que quería disfrutar a mi hijo y acompañarlo en todas sus etapas. Ser mamá me ha hecho cuestionarme más e intentar cada día de ser una mejor persona y ejemplo para mi.

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Joana y Karola, Econiños

Econiños surgió,  cuando nuestros hijos nacieron… Nos gustaba ir a las tiendas de ropa usada para niños que hay en el sur. Por alguna razón, en Santiago nunca habíamos visto, generalmente hay sólo tiendas con ropa de adulto. La ropa usada para niños además tiene muy poco uso, está en buen estado y además uno puede encontrar prendas lindas, divertidas, y de muy buena calidad. Así que un día, pensando en cómo podríamos montar algo que nos diera un ingreso extra, y que al mismo tiempo nos gustara, se nos ocurrió.

Este proyecto ¡tiene todo que ver! con nuestra maternidad, de no ser por nuestros hijos y la experiencia de buscar una alternativa buena y barata, creo que no se nos habría ocurrido. Luego, el gusto por apreciar cada prenda, ver el tipo de tela, los colores, los diseños, fue algo que vino después. Las dos revisamos prenda por prenda, sólo por gusto, y sabemos exactamente qué hay en la tienda.

La maternidad como nuevo foco

Definitivamente tener hijos requiere  de tiempo para estar con ellos, que es menos tiempo para dedicar al trabajo o a actividades personales. Hay tratar de equilibrar, teniendo en cuenta que los hijos son importantes, pero nosotras también.

Ser mamá es una oportunidad de sacar lo mejor de uno. Implica ayudar a un ser humano a entender el mundo, desenvolverse, ser personas íntegras, fuertes, independientes. Más allá del resultado cuando ya son adultos, se trata de hacer lo mejor que uno puede.  Tener hijos es una opción. Y tiene consecuencias, como cualquier decisión que uno toma. Pero no lo llamaría costos. Lo que uno deja de hacer, si es que deja de hacer ciertas cosas por tener hijos, se reemplaza por otras actividades que pueden ser igual de positivas. Por ejemplo, puedes perder independencia, pero ganas compañía.

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Blanca Garcia, Crianza en Flor

Crianza en Flor surge una noche del 2011 mientras amamantaba a mi hija. Tenía la motivación de inventar una forma de trabajar que me permitiera no tener que renunciar a la crianza y en la que pudiera compartir con otras familias. Esa noche, junto a la leche, fluyó el nombre y la idea a corto, mediano y largo plazo. Luego, pedí a mi hermana que diseñara el logo, unas semanas después me lancé con un espacio en Facebook compartiendo información y a los meses, con lo que cobré del seguro de cesantía comencé la tienda on-line.

Este proyecto se relaciona íntimamente con mi experiencia diaria de ser madre. Cada producto que ofrezco lo usamos en la crianza de nuestra hija y nuestro hijo; cada libro lo he leído y me ha iluminado en alguna parte el camino; las asesorías y los círculos de crianza buscan satisfacer la necesidad de encuentro que he sentido que las madres y los padres vivimos en estos tiempos. Crianza En Flor crece en la medida que crezco como mamá, a partir de mis aprendizajes, errores y desafíos, así que no paro nunca de “sacarle punta al lápiz”.

Un sólo camino

Mi desarrollo profesional está actualmente también de la mano de mi maternidad. Mis formaciones previas como educadora de párvulos, profesora básica y terapeuta floral se resignificaron con la experiencia de ser madre. Y mis recientes formaciones como diplomada en apego seguro o educadora de disciplina positiva las tomé buscando más herramientas para la vida diaria con mi hija e hijo.

He logrado comprender que no tengo dos campos de acción, la Blanca profesional y la Blanca mamá. No puedo, ni quiero separarlo. Mi desarrollo personal y profesional, mi felicidad, está dado por la conciliación real de lo visible y lo invisible, del trabajo y la crianza. 

Ser mamá me llena de desafíos cotidianos. Diariamente me lleva a mirar lo mejor y peor de mi, a abrazar mis luces y mis sombras, mi locura y mi iluminación. Siento que en mi vida lo bueno de ser mamá es que me permite acceder al autoconocimiento, desarrollarme en plenitud y me da la oportunidad de ser mejor persona.

Por sobre el sistema

Los costos de la maternidad los veo en las políticas públicas y sistema económico castigadores. Reflejados en el postnatal de tan sólo 5 meses y medio (y no para todos), las Isapres que nos cobran más, los fueros maternales no respetados, las horas de alimentación hasta los 2 años que no se cumplen, ausencia de licencia para cuidar, horarios laborales que no concilian con la familia, pensiones bajísimas para las que se han dedicado a criar, etc. La protección a la maternidad, la paternidad, la infancia y a la familia, son temas absolutamente pendientes en la agenda política y económica de Chile.

La maternidad la veo como un catalizador en nuestras vidas. Jamás seremos las mismas personas después de convertirnos en madres. Tenemos la oportunidad de experimentar la transformación de nuestros cuerpos, de nuestras emociones, de nuestra forma de pensar y del nivel de consciencia. Creo incluso que nos hacemos más valientes y audaces. Usar todo este gran impulso a nuestro favor, a favor de nuestros hijos y de la sociedad, es el gran desafío.

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En Alapa esperamos que estos relatos personales te sirvan de inspiración para vivir la maternidad a tu medida. Y quizás, armar tu propio emprendimiento.

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