Autora: Agustina Bosio
Fuente: Mamadre.cl
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Hablamos sobre maternidad entre amigas, hablamos en nuestros círculos de mujeres. Hablamos de maternidad con los profesionales que nos apoyan en nuestro parto y embarazo, hablamos sobre maternidad con el pediatra. Leemos y escribimos mucho sobre maternidad. Pero sobre paternidad ¿cuándo hablamos? Sobre paternidad hablamos bastante poco.
Quizá sea porque al menos, quien escribe y gran parte de las que leen son madres y no padres. Pero también creo yo que se debe a que en nuestra cultura, la crianza es una tarea asignada a las madres. Los padres apoyan, ayudan, proveen. A pesar de las revoluciones feministas y de que todo apunta a promover el fin de los roles de género, los doctores, las publicidades, nuestras páginas informativas y reflexivas, le siguen hablando a las madres.
Hablemos hoy de los padres. Hoy se habla mucho de “coparentalidad”, o como padres y madres compartimos roles y tareas en la crianza de nuestros hijos. También se habla de la “paternidad activa”, como una forma de contraponernos a un rol pasivo en la crianza. Sin embargo a mi me acomoda mas, así como cuando hablamos de maternidad, hablar de PATERNIDAD CONSCIENTE. Porque tanto a un hombre como a una mujer no podemos pedirle que sea alguien que no es, la paternidad tiene que ser desde la conciencia de si mismo que tenga cada persona.
Si hablamos de “Paternidad activa”, podemos reducir el rol de padre en la crianza a realizar ciertas actividades. Un papá que haga comida y que de comida. Un papá que bañe y cambie pañales. Un papá que se despierte por las noches. Un papá que juegue y portee. Pero ¿es eso lo que los papás y los niños necesitan? ¿No será mejor que un papá “hacedor”, tener y ser un papá consciente?
Quizá la diferencia sea sutil, pero para mi representa un mundo. Un papá consciente es un papá que quiere hacer la comida porque le importa la calidad de los alimentos que sus hijos consumen y se siente responsable de su alimentación. Un papá consciente busca vincularse con sus bebés desde su propia historia, desde quien él es, no lo que hace. Un papá consciente no se preocupa de ser un papá presente, es un papá presente porque su paternidad, al igual que nuestra maternidad, lo cambió como persona. Un papá consciente ya no es el mismo que era antes, se revisa y reflexiona sobre quien es y como eso decanta en la relación con sus hijos/as. Un papá consciente repasa su historia y los mandatos que trae desde su familia de origen, desde la sociedad que habita y trabaja en liberar a sus hijos de los mismos. Un papá consciente se hace cargo de sus heridas y sus sombras, las mira de frente y crece. Un papá consciente busca ayuda cuando siente que no puede solo.
Un papá consciente nunca será un papá pasivo. Porque la consciencia de uno mismo implica ser agente de cambio, ser activo protagonista de mi vida, de mi parentalidad como parte de mi vida.
No se trata de que los roles en la crianza sean iguales para los padres que para las madres. Se trata de que dos personas conscientes de si mismas puedan encontrar el equilibrio distribuyendo tareas de manera en que cada uno sienta que es el mismo en esto también. Porque nadie puede ser mejor persona, nadie puede ser mejor padre o madre si eso es impuesto desde afuera. Es una cambio personal, un proceso único que pertenece a quien lo vive y a nadie mas.
Creo que por eso suele ser tan difícil que nos pongamos de acuerdo en la crianza. Somos ambos seres separados y diferentes, con diferentes historias, que crecimos en contextos diferentes, tratando de ser nosotros mismos en la relación con nuestros hijos, en el seno de nuestra propia familia.
¿Cómo derribar mitos respecto de los roles de género en la parentalidad? Trabajando en nosotros mismos para no reproducir mandatos respecto de la parentalidad, para liberarnos de culpas y criar en libertad. Y lo que siento es mas importante aún, criando a nuestros hijos alejados de los estereotipos. Criarlos libres de sentir y de expresar todas las emociones. Criándolos responsables y conscientes de la importancia que tienen como agentes de cambio en el mundo que ellos, así como nosotros, crean día a día.
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