Autora: Myriam Moya
Fuente: Enminusculas.com
–
Todos los días son el día de la madre.
Todos los días podríamos intentar encontrar un momento a solas para honrar el útero que nos acogió y/o los brazos que nos acunaron. Desde el respeto y en silencio.
Todos los días podríamos pensar que somos parte de una cadena interminable de matrioskas, eso relativizaría nuestro paso por el mundo y nos acercaría de una manera sencilla a la inmortalidad y al origen.
Todos los días sería hermoso agradecer y cuidar de alguna manera a esa otra madre tierra que nos engloba y protege, y hacerlo de manera consciente.
Todos los días abrazar también la parte masculina que está en nosotras y que completó la primera célula porque es muy necesario que todo sea visible.
Todos los días, mirar a los ojos de cada uno de nuestros retoños y agradecerles el habernos convertido en alguien diferente, una mujer mucho más sabia, más vulnerable, empática y madura.
Todos los días reconocer en nuestros hijos/as a nuestros maestros/as.
Todos los días podríamos quitarle los adjetivos a nuestra maternidad y acercarnos al resto de mujeres que recorren (cada una a su manera) el mismo camino.
Todos los días podríamos tender puentes.
Y entonces devolverle a la palabra “madre” todo lo sagrado y todo lo cotidiano, para que no necesitemos un día de la madre para estar presentes.
Para que seamos simplemente eso hijas-madres-hijos-padres… parte de la cadena del flujo de la vida.
El gran milagro.
Pd: La presencia no siempre es física, los/las que han perdido a sus madres o a sus hijos en el camino lo saben bien, la presencia es intemporal, honrémoslos también.
–
Texto: Myriam Moya www.enminusculas.com
Imagen: Gioia Albano www.albanogioia.com
También te puede interesar:
Puérpera eterna
Autora: Blanca GarcíaFuente: Crianza En Flor - Hace unos años escribí: “Sumergiéndome.Sumergiéndome a lo profundo de estas aguas.Sumergiéndome esta vez un poco más consciente.Sumergiéndome un poquito más sabia ¿será que llego más profundo?” Cuando lo escribí estaba...
Poner el cuerpo
Poner el cuerpo. Cuando caben entre tus pechos.Cuando ya no te caben en el cuerpo. Para bajar sus fiebres.Para darles calor.Para escuchar sus toses.Para que respiren más fluidamente.Para anticipar los vomitos, también las diarreas.Para acompañar sus dolores de...
A veces mamá tiene truenos en la cabeza
"A veces mamá tiene truenos en la cabeza", de Bea Taboada, un relato que nos ayuda a entender las emociones y a disfrutar de ellas. Puedes verlo también https://youtu.be/Cd6qhoxod6Q www.crianzaenflor.cl También te puede...